Es la excursión típica, la que todo visitante al valle de Ordesa suele realiza.
Atraviesa en sentido longitudinal todo el valle, por lo que resulta una bella estampa cada recodo del camino; cada mirada hacia las alturas, a derecha o izquierda…
Acantilados, fajas, cascadas (las Gradas de Soaso), y la vegetación –bosques de pinos, abetos, hayas (el Bosque de las Hayas es de una belleza extraordinaria durante el otoño), pradera alpina…–, y al final del trayecto, la Cola del Caballo –que en primavera y comienzos del verano arroja la mayor cantidad de agua–.Las flores –a comienzo de julio– cubren el manto alpino del fondo del valle de forma multicolor.